Reir y sonreir

En estos momentos sonrío, sin causa, como un chiste sin sentido. Es necesario reír, es como que alegres y sonrientes estamos predispuestos a encarar la vida de otra manera. Todo vuelve, dice el dicho, a mi parecer en las relaciones humanas es así. Por el buen camino se llega a destino, por más que haya más de mil desvíos; un consejo: frente alta y una sonrisa en la cara. No lo planteo, como hace mucha gente, como mecanismo de defensa sino como sistema de seguridad personal, de estar seguro con uno mismo, radiante. Cuando uno esta bien atrae seres y cosas que están bien.
Hay otro dicho, que dice al mal tiempo buena cara, y es así. De nada nos sirve lamentar la adversidad, es favorable hacer algo para sobre llevarla, hasta que con el tiempo pase, o se apacigüe.
Que cosa más linda que robar una sonrisa, ¿Te acordás la última vez que robaste una? ¿ y cuando fue la última vez que te la robaron a vos?
Recién hablando por teléfono le robé una sonrisa a un familiar, con tan solo repetir una frase anecdótica. Es muy simple, la sonrisa libera, expresa, y sobre todo agrada.
También tenemos el sonreir del nervioso, o del picaro al que su sonrisa lo delata. Pero no importa te invito a reirte, si a reirte, una y otra vez.