Muchas veces uno espera, y no para nada. Pero el tiempo tiene la magia... todo con el tiempo se arregla, y los mensajes llegan a destino. Muchas veces somos canal, somos emisor y otras tantas los que queremos recibir el mensaje.
Hoy recibí el mensaje tan esperado. Quizás el contenido del mensaje no era tan importante para mi, pero si lo que significó, y ojo no el contenido, sino que el mensaje haya sido enviado por ese emisor.
Fue la actitud, la acción del emisor al ejecutar el envío, y el que se concrete la llegada del mismo lo que me alegró.
Otras veces uno quiere hacer llegar un mensaje, pero los oídos son sordos. Intentamos de una y otra forma hacernos entender, y parece que nuestro mensaje no llega. tengamos fé en el tiempo que algún día llegará. ( tarde o temprano, temprano o tarde)
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